Los festivales musicales ya sabéis de qué forma acostumbran a concluir, con montones de embarazos no deseados por el hecho de que hay zorritas que se ponen hasta arriba de alcohol y que acaban haciendo insesateces. Esta chavala borracha se ha ido tras unas casetas a joder con un tío al que termina de conocer y al que seguro que no vuelve a ver en su puta vida tras este polvo. No se percata de que hay alguien que les está grabando con el móvil y que va a inmortalizar el instante en el que posiblemente se quedase preñada de un ignoto.