Ella pide por favor que no lo hagan pero los tentáculos le entran en la boca hasta la garganta y le lamen los pezones sin compasión, para luego penetrarle el coño haciéndola gritar de dolor al principio y placer después, pidiendo que la follen mas duro. La chica vuelve a la realidad y tiene el coño mojado. La droga que acaba de probar es muy efectiva. El científico la folla duro para calmarle la necesidad de sexo real que siente en el cuerpo