Karina White vuelve de su clase de tenis y toma una ducha en la habitación de su madre. El padrastro entra viéndola desnuda y se tapa los ojos pidiendo disculpas. Karina le dice que no hay problema y besa al hombre pegando su cuerpo al de el. El hombre se pone cachondo y le folla el coño con los dedos y después se lo come. Ella le hace una mamada y luego el la folla como había fantaseado tantas veces hasta eyacular en el rostro de la cachonda hijastra