Esta madura harta de estar encerrada en su casa le pide a su esposo que le pague unas vacaciones a una zona cercana a la playa para distraerse de sus problemas. Su padre une a su hijo para que la cuide durante sus vacaciones, una vez llegados al hotel esta rubia se calienta y comienza a seducir a su hijastro masturbando rico su gruesa polla. Pasado un rato esta rubia tiene el coño aguado así que le pide a su joven amante que la folle con fuerza cosa que hace a la perfección este joven que le termina echando su leche dentro su boca.