La princesa Zelda está cachonda, y luego de encontrar un sapo azul, lo besa. Cuando el sapo se materializa, ella le agarra la polla y le hace una estupenda mamada, con mucha saliva y poniéndose tan cachonda que se le cruzan los ojos. Ella luego se mete los dedos en el coño y se folla el coño intensamente, para luego dejar que el sapo le folle el coño mientras ella gime de placer. el sapo la folla duro en varias posiciones hasta eyacular dentro del coño de ella. ella abre el culo dejando que el abundante semen se derrame del coño