Esta hermosa alemana es una estudiante de intercambio que comete el error de querer robar en la tienda como una travesura. Lo que parecía algo divertido termina con ella llorando sabiendo que está en problemas. El guardia le da la chance de chuparle la polla para quedar libre y ella acepta, aunque le da asco. Ella llora mientras el hombre refriega la polla por el rostro de la chica y luego la folla. A el no lo ablandan las lagrimas de las ladronas